El segmento de manufactura enfrenta numerosos desafíos: un consumidor más exigente en términos de tiempos de entrega y de calidad de los productos, cadenas de suministro cada vez más globales y complejas, la necesidad de volver el negocio cada vez más sustentable… En este sentido, los sensores de internet de las cosas dispuestos en diferentes puntos de una fábrica (en lo que se conoce como IIoT o industrial internet of things) pueden proveer todo tipo de beneficios. De hecho, se consolidan como una de las columnas vertebrales de la transformación digital en el mundo de la manufactura.
La consultora McKinsey estimó que la mejora en las operaciones promovidas por soluciones de IoT podrían equivaler a más de US$740.000 millones anuales.
Es que esta tecnología permite capturar datos sobre el estado de los equipos, los procesos, las materias primas, los productos terminados, los medios de transporte o cualquier otro elemento para tomar decisiones acertadas, eliminar cualquier desvío respecto de la planificación y generar optimizaciones a gran escala.
Anticipando los desperfectos
Una de las grandes aplicaciones de internet de las cosas al mundo de la manufactura es la del mantenimiento predictivo: sensores en la línea de montaje captan en todo momento los niveles de desgaste, cambios bruscos de temperatura, presencia de vibraciones no contempladas o indicadores que están por encima o por debajo del estándar y generan alertas tempranas.
El mantenimiento predictivo es clave para disminuir los costos y los tiempos de inactividad de las maquinarias y, como consecuencia, también es fundamental para cumplir en tiempo y forma con las exigencias de la demanda.
En esta línea, también es posible analizar los datos de rendimiento de los equipos para alcanzar la máxima performance y generar tiempos de producción más cortos.
La máxima calidad, la máxima personalización
Al proporcionar datos de la planta segundo a segundo, los dispositivos de IoT permiten llevar la capacidad productiva a un nuevo nivel.
En combinación con herramientas analíticas y de inteligencia artificial, IoT también puede utilizarse para encontrar imperfecciones en los productos o detectar desperfectos en los equipos que podrían repercutir en la calidad del artículo final.
Otra gran oportunidad que tiene este segmento es la de incrementar los niveles de personalización: la combinación de IoT con machine learning, por ejemplo, puede emplearse para configurar las maquinarias de manera automática y adaptarlas para la fabricación de productos con determinadas características particulares en tiempo real.
Por supuesto, cada artículo puede ser identificado para alcanzar una trazabilidad completa desde que sale de la línea de fabricación hasta que llega al cliente final, pasando por todas las instancias de almacenaje y transporte. De esta manera, se puede automatizar el control de los inventarios a lo largo de todo el ciclo de vida del producto y alcanzar la máxima eficiencia para que las existencias coincidan casi a la perfección con la demanda.
La seguridad y la sustentabilidad ante todo
En épocas de COVID-19, los sensores de IoT en una planta industrial pueden utilizarse para tomar la temperatura de las personas o evaluar que no se produzcan aglomeraciones de trabajadores, entre otras opciones.
Fuera de la pandemia, esta tecnología contribuye fuertemente a la seguridad de las operaciones: cascos inteligentes que evitan golpes, wearables que previenen accidentes e implementos diversos para garantizar que nada ocurra en ambientes de riesgo. Por ejemplo, en diversas industrias los colaboradores reciben etiquetas RFID (identificadores de radiofrecuencia) que recopilan datos sobre su ubicación y sensores portátiles que capturan frecuencia cardíaca, temperatura, respuesta galvánica de la piel y otros parámetros para detectar patrones de comportamiento inusuales (por ejemplo, movimientos verticales repentinos, frecuencias cardíacas inusuales, etc.), y evitar que los trabajadores se caigan, hagan sobreesfuerzo o sufran lesiones.
En industria como petróleo, gas y minería, es un aliado esencial para llevar tranquilidad a entornos muy complejos como pueden ser los yacimientos y hasta permiten anticipar situaciones de peligro, como escapes de gas.
Desde el punto de vista del cuidado medioambiental, IoT en el mundo de la manufactura permite optimizar los consumos de energía y de recursos en general.
Con IoT, las empresas manufactureras pueden optimizar los procesos de fabricación, controlar la cadena de suministro de punta a punta, acelerar la comercialización y predecir con precisión la demanda. Una tecnología que se consolida como una verdadera fábrica de beneficios.