En un mundo cada vez más digital la implicancia de la tecnología en la vida de las personas es cada vez mayor y total.
El camino de la innovación es un recorrido de cambios estructurales en la vida de todos y las empresas que se adaptan a la nueva cultura digital son las que lograrán sobrevivir y crecer.
En este sentido, los sectores de: retail, logística, telcos, media y salud son los grandes victoriosos y ejemplo de lo que otras industrias deberían hacer y qué camino tomar.
En la actualidad, los beneficios de la tecnología son innumerables. Desde el punto de vista de las personas, y en términos de conectividad, nos permite acercarnos a distancias donde antes uno no tenía pensado que podía suceder.
Haciendo un buen uso de la tecnología podemos realizar diversas tareas y actividades para las que antes tendríamos que habernos trasladado físicamente.
Se puede hacer diversas actividades como estudiar a distancia, trabajar de forma remota con empresas y personas localizadas en distintos puntos del mundo o realizar consultas médicas de forma online.
Nuevos desafíos
La tecnología busca de manera continua el desarrollo y la innovación de productos y servicios que puedan ayudar a las personas en sus necesidades y requerimientos cotidianos.
Si bien cada avance supone un nuevo desafío y un proceso de adaptación, también nos propone una mejora en nuestra calidad de vida.
En algunos ámbitos, sectores, industrias y personas aún hay miedo al cambio, dado que existe una cultura tradicional afianzada.
Sin embargo, las empresas tradicionales se vieron obligadas a la necesidad de adaptarse al cambio tecnológico para lograr mantenerse vigentes en el mercado.
Hoy día, hay una gran cantidad de industrias, que se vió beneficiadas gracias a la tecnología, en donde los desarrollos tecnológicos tuvieron que acelerarse, adaptarse y funcionar de una manera mucho más eficiente para que su adopción y puesta en marcha fuera ágil.
Entre los beneficiados, podemos destacar al sector retail, donde hubo empresas que tuvieron que reacomodar y reestructurar su modelo de comercialización debido a que no contaban con procesos digitales.
Ni el de logística, con herramientas para acortar la entrega de productos; las telcos, donde ya se están implementado el 5G para generar una conectividad total, salud, donde hay grandes avances para poder monitorear online el estado de salud de los pacientes.
Sobre esta última industria, lo cierto es que la tecnología fue una aliada clave en la crisis del COVID-19, ya que, supuso una ayuda a todo nivel, tanto para las personas como para la supervivencia de empresas y la articulación de las industrias.
Incluso el poder conectarnos a través de una pantalla con nuestros seres queridos en pleno confinamiento, colaboró a disminuir los efectos nocivos de no poder encontrarse con los afectos y suavizar la soledad de las personas.
Sin dudas, estamos frente a una profunda transformación digital, por lo que resulta difícil realizar una proyección de aquí a 10 años, ya que, cada vez los cambios son más rápidos y disruptivos.
Sin embargo, seguramente en un futuro, no muy lejano, podremos contar con grandes avances como autos autónomos en mayor adopción, una red de blockchain como herramienta estructural para hacer negocios, conectividad total, prototipos de autos voladores, etc.
En sí, un mundo más veloz, con verticales más marcadas y una tecnología que no para de crecer y que cambia definitivamente el modo de vida de las sociedades.